Los miembros del claustro de profesores se quedaron patidifusos al contemplar cómo María Jesús Gómez Hermida ni presentaba su candidatura ni su proyecto de dirección ni aceptaba someterse a ningún tipo de debate, dando todo un recital en lo que a diálogo, cortesía y respeto y consideración por sus compañeros se refiere: las firmas de casi una treintena de profesores permitieron convocar la mencionada reunión del claustro, que esperaba oír a los dos candidatos.
Pero, sorprendentemente, María Jesús Gómez Hermida rehusó participar en cualquier tipo de presentación o debate, y lo más que acertó a responder fue que ella no iba a hacer ninguna presentación de su proyecto ni iba a debatir nada porque ella no había solicitado el claustro, y que todo lo que tenía que decir sobre su candidatura estaba en su proyecto de dirección, lo cual constituye el colmo del disparate, dadas las innúmeras deficiencias del pastiche que Gómez Hermida llama proyecto.
................................................................................................................... [Ver: Jun08. Vergüenza propia...] [Ver: Análisis comparado.]
Y la estupefacción del auditorio iba en aumento cada vez que un profesor hacía alguna pregunta a Gómez Hermida, y Gómez Hermida, acompañada de su candidato a jefe de estudios, Josefa Villanustre Otero, alias "Finuca", nada respondía, sino que ambas rehuían la mirada de los asistentes con las cabezas gachas y pegadas a las mesas, como si de niños pequeños avergonzados que no saben qué responder se tratase: pero es que hubo diversos profesores que, sin creerse lo que estaban presenciado, repetían la misma pregunta dos o tres veces, y la única respuesta que obtenían era el movimiento de Hermida y "Finuca" enterrando en silencio sus cabezas en la mesa.
Todo esto, como puede suponerse, provocó una variada gama de reacciones entre los asistentes, desde la indignación por lo que tenía tal actitud de desprecio hacia el claustro hasta la sonrisa por el disparate que estaba aconteciendo.
Tienen gracia, no obstante, un par de comentarios que refleja Gómez Hermida en su "proyecto" de dirección cuando habla de fomentar un buen clima de convivencia y cuando dice que no hay participación ni implicación por parte de los miembros del claustro de profesores: parece no darse cuenta de que quien no sólo no fomenta el buen clima de convivencia, sino que por todos los medios rehúye la participación y el diálogo, es la propia Gómez Hermida. Y si lo rehúye debe de ser porque en el momento en que intente entrar en debate con cualquiera acerca de algo podría revelarse su incapacidad e incompetencia al respecto, y entonces no le quedaría más remedio que bajar la cabeza avergonzada, lo cual ya ha tenido que hacer en muchas ocasiones.
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